Logis Hotel Notre-Dame - Restaurant Ouvert Midi Et Soir Sauf Dimanche Soir 3*
Servicios principales
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Wi-Fi
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Piscina
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Actividades
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Spa y relajación
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Comida/Bebida
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Salas de reuniones
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Agradable para niños
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Desayuno
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Aire acondicionado
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Mascotas
Ubicación
Con una piscina, el Logis Hotel Notre-Dame - Restaurant Ouvert Midi Et Soir Sauf Dimanche Soir Danne-et-Quatre-Vents, de 3 estrellas, está ubicado a 1 km del chapelle Notre-Dame-de-Bonne-Fontaine de Bonne-Fontaine. WiFi se ofrece en toda la propiedad, y el hotel dispone de un aparcamiento privado en las instalaciones.
Este hotel se encuentra a 2 km del centro de Danne-et-Quatre-Vents y a 50 km del aeropuerto Estrasburgo. El Jardín Botánico del Col de Saverne está a una distancia de 5 km del establecimiento y Saverne a 7 km. El hotel está a unos 15 minutos en coche del Eglise Notre-Dame-de-la-Nativite y de otras atracciones principales de Danne-et-Quatre-Vents.
Algunas de las 25 habitaciones, amuebladas con un aparador y un sofá, cuentan con una plancha y tabla de planchar, climatizador, además de Wi-Fi gratis y TV por satélite. Las habitaciones están equipadas con un baño privado equipado con secadores de pelo y artículos de tocador para huéspedes. Muchas habitaciones ofrecen vistas a la piscina.
El Logis Hotel Notre-Dame - Restaurant Ouvert Midi Et Soir Sauf Dimanche Soir Danne-et-Quatre-Vents sirve un desayuno buffet.
Reseña de un crítico de hotel
Durante mi reciente estancia en el Logis Hotel Notre-Dame - Restaurant Ouvert Midi Et Soir Sauf Dimanche Soir, me encontré sumergido en la calidez de este acogedor hotel familiar en la región de Lorena. Al llegar, disfrutamos de un delicioso desayuno buffet diario que incluía productos locales, una verdadera joya para un amante de la gastronomía como yo. Las habitaciones, todas equipadas con balcón y baño privado con comodidades gratuitas, eran confortables y estaban muy limpias, aunque el pequeño tamaño del baño no fue un inconveniente. La atención del personal fue excepcional; me sentí bienvenido desde el primer momento. La ubicación del hotel, en las cercanías del hermoso bosque de los Vosgos, ofrece múltiples oportunidades para hacer senderismo, lo que fue un complemento perfecto a nuestra escapada. Además, el restaurante sirve una cocina tradicional local que, aunque no tuve tiempo de probar, prometía ser un festín para los paladares exigentes. Sin duda, un lugar al que volveré, no solo por su encanto y calidez, sino también por la promesa de explorar la cercana actividad de vuelo en microlight. ¡Recomiendo encarecidamente este hotel a quienes buscan una experiencia auténticamente local!